19 mayo 2007

ANÉCDOTA DE NIÑEZ



Para añadir alguna otra cosa más a mis anécdotas de la niñez, hoy les contaré lo que nos pasó a mi gemelo (Baturro2) y a mí en la hermosa ciudad de Zaragoza, donde nacimos y nos criamos hasta los 19 años. Después salimos ambos de casa para terminar la carrera universitaria.

Corría el año 1.942 y acostumbrábamos, durante las vacaciones escolares del verano, a montar en bicicleta por la urbe. Entonces se podía, porque circulaban por sus vías toda clase de vehículos, unos a motor y otros de tracción animal (entiéndase carros, tilburíes, ‘bicicletas’, etc…) pero sin riesgo aparente para los conductores.

Un buen día nos decidimos a ir hasta el Parque Primo de Rivera, distante de casa 1,8 km. y, al volver nos topamos con la parte trasera del remolque de un tranvía, -de los de entonces, claro- que estaba detenido en una parada. Sin pensarlo más, nos agarramos al parachoques del mismo y así fuimos, sin tener que pedalear, hasta la parada de la Plaza de San Francisco donde, el oportuno municipal otra vez, nos hizo soltar rápidamente del vehículo y ‘aparcar’ junto a la acera derecha.

De muy buenas formas nos extendió la correspondiente sanción, no sin antes examinarnos sobre: dónde vivíamos, nombre del padre, edad, estudios, etc… ¡Qué curiosidad tenía el agente por conocer nuestra vida! ¡Digo yo!

Creo que, ahora que soy un poco menos joven, el urbano nos hizo un gran favor. ¿Por qué?... Nosotros íbamos sobre una sola bicicleta, uno pedaleaba y otro conducía. ¡Qué horror! ¡Cosa de circo! Hoy en día lo tildarían de ‘conducción temeraria’… Pero no fue así, el policía fue benévolo con nosotros. Sólo multa. ¡¡¡Graciaaaas!!!

¡Ah!. Se me olvidaba… la multa no llegó nunca a casa y nuestro padre continuó dejándonos pasear por la ciudad en bicicleta.


PROBLEMITA

Hoy va muy sencillo, para que abran boca y estén preparados a resolver otros más complicados.

Si he multiplicado por 5 el dinero que tenía y he ganado 500 euros. ¿Cuántos euros tenía?

Adiós y hasta pronto.


P.D.- Cartón de una mendiga: '¡Ayuda, por favor! Soy viuda, tengo 6 hijos y mi marido está en la cárcel'.


1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Toma! ¿Será viuda del primer marido y el segundo es el que está en la carcel?
Baturro, estas inspirado y el blog avanza muy deprisa. Casi no me da tiempo...
La Peralina