Comportamiento extraño

¿Por qué los profesores tratan de tú a los alumnos buenos y de Vd. a los torpes?

Esto se da mucho entre los profesores de equitación. Cuando un alumno va bien en la clase de monta, el profesor (en lo sucesivo ‘profe’) le dice con voz melosa: “Bien, bien, tírale un poco de la rienda derecha, bien, ahora va bien, déjalo que se alegre un poco… y otras ‘órdenes’ parecidas”. Sin embargo, cuando el jinete no es capaz de hacerse con el caballo, inmediatamente el profe le espeta: ¿Es que no sabe cómo se domina a un jamelgo?. Ya no digamos nada si al jinete novel se le ocurre ‘caerse’ del mamífero solípedo y se hace una brecha. Acto seguido oye la voz escandalosa de su maestro: “Pero… ¿Quién le ha mandado a Vd. bajarse del caballo?”

No hay palabras para explicar la cara que pone el discípulo.

¿Existen las personas invisibles?

No hay nada más ridículo que una persona al volante de su automóvil, parado en un semáforo y hablando por un teléfono móvil manos libres. Lo verá Vd. gesticular como si hablara con una persona presente en su coche. ¿Existen seres vivos invisibles?

¿Y qué me dice de las personas que van hablando con el móvil y llevan un micrófono en el pecho o en la solapa? Da la sensación de que les falta ‘algún chip’ en el cerebro. Pero a todo nos acostumbramos los mortales. ¿No nos causaba, hace unos pocos años, hilaridad ver a los peatones con su pequeño teléfono buscando ‘cobertura’ saliendo de una cafetería o acurrucándose en algún portal?

Otro día, más cosas.

Comentario jocoso

Cuando alguna vez nos hemos ‘escaqueado’ de la mujer y nos íbamos a Londres, siempre nos encontrábamos con algún conocido – en las mismas circunstancias que nosotros – y la verdad, no nos hacía mucha gracia.

Para justificarnos decíamos sonriendo: “Qué pequeño es el mundo, ¿verdad?”

No pensaba yo que era tan pequeño, pero al ver el otro día la carrera de motos GP, me afiancé en que no sólo era pequeño para encontrarnos las personas en lugares tan dispares y tan grandes como Londres, París, etc.… ¿Por qué? Muy sencillo, pensaba que el mundo se había vuelto pequeño hasta para colocar anuncios y por lo tanto había que buscar sitios donde ‘pegar’ estos reclamos, sin los cuales las casas más conocidas no pueden prescindir, so pena de que bajen las ventas de su producto, aunque sea mundialmente conocido.

Pero, mira por dónde, ya han encontrado sitio para hacer la propaganda. ¿Cuál? El culo – alias pompi – de los corredores de motos más famosos y a los cuales las cámaras de televisión sacan de ‘espaldas…’ durante un buen rato. Nada tiene de bello esto pero… si vende… allá ellos. Yo paso de esos productos que buscan estos lugares tan pudorosos para generar consumo en el mundo.

Hasta otra !!!!

DISGUSTO DEL SR. CORONEL

- Cuando yo estaba haciendo las prácticas de alférez de la IPS, - allá por el año 1957 - en un Regimiento de Ingenieros, alternaba con los oficiales profesionales.

Una tarde, como todas las de la semana, había un teniente que tenía que dirigir y mandar la instrucción de orden cerrado, que así se llama cuando es hecha en el patio del cuartel pero, lo que son las cosas, se entretuvo terminando una partida de dominó y claro, no estaba a la hora.

En esto, casualidades de la vida, el Sr. Coronel apareció en la explanada y no vio al oficial cumpliendo con su obligación. Al entrar en la Sala de Oficiales preguntó por el teniente de servicio y, naturalmente este se levantó rápido como un rayo. El Coronel lo invitó a acompañarle a otra habitación y le echó un buen ‘rapapolvo’ haciendo mención a los artículos de las Ordenanzas donde se mencionaban todas la obligaciones del oficial ‘de semana’.

Una vez terminó la ‘bronca’, el oficial se incorporó nuevamente a la Sala y todos los que allí estábamos le preguntamos que le había dicho. El, sin inmutarse, nos contestó: “No sé, pero… se ha llevado un disgusto…”

Esto no era normal, pues recuerdo siempre con qué espíritu se cumplían las obligaciones propias de cada situación. Siempre lo he tomado como ejemplo para mi vida personal y profesional.

Manías molestas

A todos nos cuesta traspasar el umbral de una puerta de acceso a un lugar más amplio, ya sea a un andén o bien, a salir a la vía pública, desde un recinto cerrado.

¿Por qué la gente se para a charlar, a esperar el autobús, precisamente en la puerta de acceso y salida? No dejan pasar a nadie y, además, se pueden coger una 'pulmonía'.

La gente que se aprecia en la fotografía estaba esperando que, el autocar de línea regular, abriera sus puertas para acceder al mismo, cosa que sucedió tras unos minutos.

Esta fotografía está tomada en una estación de autobuses, de cuyo nombre no quiero acordarme, con una cámara digital de 'bolsillo', que acostumbro a llevar siempre conmigo. Disculpar si la calidad no es buena, estaba el lugar con muy poca luz.

Hasta la próxima fotografía, que será muy curiosa.

Información educada

Ya sabemos que, no hace muchos años, los ladrones eran ‘gente honrada’, por eso no es de extrañar que aparecieran letreros informándoles de lo poco que quedaba en el local cuando se cerraba la tienda.
Esteque se ve en la fotografía está tomado en la estación de autobuses de la ciudad de Pamplona. El propietario pensaba que, actualmente, los amigos de lo ajeno eran también honrados, desgraciadamente ahora se comportan de otra manera, y a este localito le rompieron las lunas en más de una ocasión.

La fotografía está hecha en muy malas condiciones de luz.

Curiosidades

Curiosidades

Saludo a mis lectores.

Desde esta página, quiero enviar en mi primera publicación un saludo muy cordial a todos mis futuros lectores. El baturro.