ANÉCDOTA PERSONAL

Dibujo y color de "El Baturro 1". (Ya se nota)

Esta vez no he podido resistirme a demostraros lo despistado que soy a veces. Resulta que voy al médico de cabecera con regularidad para que controle mi estado de salud general; es lo que yo llamo "pasar la ITS (Inspección Técnica Sanitaria) y el día 17 del mes actual me tocó pasarla.

Asistí puntualmente con mi análisis de sangre y orina para recibir el diagnóstico siempre acertado del 'galeno'. Después de una ratito de conversación para observar cómo me encontraba y al responderle que me encontraba mejor que otras veces, le enseñé mi analítica esperanzado y orgulloso de lo bien que iba a estar, pero cuando le echó un vistazo observé que se le mudó la expresión y puso cara de gran preocupación y acto seguido me preguntó:

"No me gusta nada este análisis, ¿no te dijo nada el médico de corazón cuando lo vió?"

"¡No...!, repondí,

"Pues está todo muy bajo y hay q tomarlo muy en serio". "¿te cansas, has tenido pérdidas de sangre...?"

"¡No...!.

Y después de un rato de cabilar por lo bajo indicó:

"Bueno, esperaremos al siguiente análisis para comparar".

"Sigue con la misma medicación y nos vemos en Junio"

Me marché con pena y gran disgusto, pues sin tener ningún síntoma de aviso era un poco raro, así que cuando llegué a casa miré mi hoja de excel donde tengo registradas mis analíticas y estaba todo bien.

¿Qué pasó? Sencillamente... QUE LE HABÍA ENSEÑADO EL ANÁLISIS DE LA MADRE y...¡claro! con 103 años rebasados era normal lo que leyó.

Quedé tranquilo, pues yo me encontraba muy bien.

¡Qué despiste!!!

Por supuesto me faltó tiempo para llamarle y deshacer el error, con lo cual quedamos tranquilos los dos.

Nos leemos otro día................¡¡¡Hasta pronto!!!

P.D.- El amigo leal más que en el bien, te acompaña en el mal.

CONFESIÓN MERECIDA

Dibujo de El Baturro 2. Color, El Baturro 1.

Un campesino viejo acudía a confesarse una vez al año, en Pascua Florida, y, a pesar de tan largo intervalo, al hombre se le venía la casa encima cuando llegaba la fecha de cumplir con la obligación. Sobre todo se le hacía muy cuesta arriba permanecer ante el confesionario más de diez o quince minutos. Por eso ideó un truco, que le salió mal. Pensó:

"Merendaré ajos, cebollas, tomates y pimientos y, por evitarse el olor, el cura me despachará enseguida"

Y así lo hizo. Se puso perdido de cebollas y ajos y acudió a la parroquia. Se acercó al confesionario y dijo:

-Ave María Purísima…!!!

El confesor que era Don Lorenzo, muy socarrón y sin contestar a la salutación mariana, exclamó:

-¡AH, GRANUJA, QUÉ BIEN HAS "MERENDAÚ"!

Y allí lo tuvo al pobre hombre más de cuarenta minutos. Merecido, ¿no?

Nos leemos otro día.....................¡¡¡Hasta pronto!!!

P.D.- ONDEANDO: Por dónde voy?

ANÉCDOTA BÉLICA

Composición del autor. Dibujo gentileza de El Baturro 2

Ayer, recordando cositas de la guerra civil, en la que participó mi amigo Félix Andía (92 años) con tan solo 18 primaveras, me contaba lo que les sucedió cerca de Tolosa, en Agosto de 1.936, cuando les entregaron los cañones a los artilleros, hombres altos y fornidos para cargar y descargar en los mulos la cureña, el tubo, las ruedas, los ejes, y demás elementos de un cañón que llevaban sobre sus ¿hombros? las acémilas. Se acercaron los dos ‘mocetes’, Baltasar y Félix a curiosear, mientras colocaban las armas en el asentamiento elegido por el mando, y los despacharon más o menos con estas voces:

-Fuera de aquí… ¡mocetes!

Pero el mayor, hombre de pocas bromas se revolvió contestando:

-¿Mocete yo…? Tengo dos hijos y he dejao preñada a mi mujer del tercero!!!

¡¡¡Buena salida…!!!

Así son los de la zona media de Navarra

P.D.- Su buen amigo Baltasar murió de un tiro unos meses después. ¡Trájico final!!!

Nos leemos otro día......................¡¡¡Hasta pronto!!!