11 enero 2017

DECISIÓN TAJANTE

Fotografía del autor

No recuedo si publiqué este post a su debido tiempo, he visto que estaba escondido entre los borradores del año 2015. De todas maneras, ahí va aunque sea repetido. Sigo con mis mismas convicciones.
Después de 61 años con carnet de conducir y con la experiencia de los más de 1.500.000 kilómetros a la espalda, he tomado la decisión "tajante" de no pasar ningún semáforo, que esté intermitente, hasta no verlo con el color verde bien claro.
¿Por qué? Sigue leyendo:
Inconvenientes de pasar con semáforo intermitente:
1. Te obliga a estar muy pendiente del tráfico.
2. Es peligroso a veces, al ser difícil comprobar, a través del parabrisas. la circulación de tu lado derecho porque intercepta la visión el pilar-soporte del techo del vehículo.
3. He visto colisiones 'tontas' por querer arrancar con máxima aceleración y fallar el coche conducido.
Ventajas de no hacer uso del semáforo parpadeando en amarillo:
a. Te relaja el cuerpo mientras esperas que cambie a verde.
b. No hay que exponerse inútilmente a arrancar y no haber comprobado bien que el camino a tomar está libre.
c. Ni siquiera hace falta casi el estar pendiente de forma obsesiva del cambio

 de color a verde...
d. Si estás relajado-distraído y no te has enterado que el semáforo pasó al color verde, no te preocupes, siempre tendrás detrás un conductor que gentilmente te avisa con una pitadita sonora el momento en que debes reanudar la marcha...

Conclusión: Pasa olímpicamente de los semáforos intermitentes.

P.S.- El vino y el sol, alegran el corazón


2 comentarios:

SUSO dijo...

Muy acertada la propuesta de esperar a que esté el verde bien claro.El intermitente es causa de muchos choques que podian haber sido evitables. La prisas del conductor son frecuentes causas de muchos accidentes tontos. Recuerdelo, ganar un minuto a lo tonto no vale la pena. Mas pronto que tarde se paga muchas veces. Un abrazo.

SUSO dijo...

Ayer se me olvidó decir un consejo. Cuando se pare detrás de un coche en un semáforo no se quede demasiado pegado a ese coche. A mi me ocurrió en Madrid que me paré cercano al de delante y antes de cambiar el semáforo, el coche de delante no debía tener el freno de mano puesto y se le fué el coche para atras sobre mi coche. Cual sería mi sorpresa cuando el conductor del citado coche se baja todo enfadado hecho un energúmeno y me vienen a mi ventanilla intentando abrir mi puerta para darme un guantazo gritándome como un loco y didiéndome que porque había arrancado y dádole a su protector trasero sin haberse cambiado el semáforo. No hubo manera de convencerlo que había sido él el causante al haberse dejado irse hacia atrás su coche debido a la pequeña pendiente que el pavimento presentaba. Cuidadito por tanto.