DIFERENCIAS PALPABLES

Cuando se televisan espectáculos tales como pelota vasca o toros, los realizadores deben estar muy atentos a ciertos gestos o expresiones de caras que pueden dar al espectador la calidad moral de las personas ejecutantes.

¿Por qué digo esto? Muy sencillo. En las transmisiones de partidos de Pelota Vasca es relativamente frecuente apreciar y entender perfectamente en algún primer plano las 'palabras malsonantes' de algún ejecutante que ha fallado una pelota sencilla de restar. Digo palabras malsonantes por no decir otra cosa más fuerte y más desagradable para nuestros castos oídos. Comparándolo hace unos días con las retransmisiones de toros, he observado que los 'maestros' suelen ser mucho más prudentes a la hora de expresar su enfado por alguna acción incorrecta que han hecho o les ha salido mal por una casualidad. No recuerdo, en todas mis sesiones de toros vistas, que no son pocas, haber escuchado o leído en su boca ninguna 'palabrota' o expresiones peor que la palabras malsonantes.

¿Por qué será? ¿Dominio del yo? ¿Profesionalidad? O no les sale porque no lo hacen nunca ni en las tientas de ganado bravo.

No hace mucho leí en un periódico local un artículo hablando de esto mismo y le llamaban la atención a los pelotaris para que se controlasen en sus expresiones, pues dejaban en mal lugar también a sus correspondientes empresas contratadoras.

P.S.- Quiero recordar y elevar una oración por el alma del torero recientemente fallecido Iván Fandiño, gran profesional y excelente persona. VALE/