Hoy día esas 'misivas' que antes contenían noticias familiares; tratos mercantiles o cariñosas líneas de amor con papel perfumado (que cursi..., pero real), se han dejado de recibir y enviar.
¿Motivo?
Los medios modernos: máquinas de escribir primero, procesadores de texto después y en la actualidad WhatsApp, mensajes cortos, a veces difíciles de comprender, correo electrónico, etc... Todo muy frío, muy frío...Ahora las únicas cartas recibidas en su sobrecito, sin sello porque ya se ha pagado el correo por contrato, son las "cartas de amor" bancarias. Yo las suelo llamar de "desamor" ya que su contenido, generalmente, es para comunicarte con trato familiar, que te han 'cargado' en tu cuenta, tal vez exigua, el recibo de la luz, del gas, del pan, del teléfono, del impuesto de circulación, de la contribución, etc... ¡Qué bonitas para echarlas directamente al "chivo", perdón, quería decir "al archivo"!
P.S.-Repicar la campana y llevar al santo, las dos cosas a la vez, no puede ser.
1 comentario:
Cuánta razón tiene el baturro...
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